Dios, en ocasiones, nos pide cosas que parecen disparatadas. Pero, CREEME, detrás de cada una de sus palabras, promesas, mandatos o frases, HAY BENDICIÓN… más de la que puedes conseguir con tus medios.
El hombre perdido en el desierto – Iglesia Cristiana Evangélica de Chamartín
Esta página utiliza cookies y otras tecnologías para que podamos mejorar su experiencia en nuestros sitios: Más información.