Elías y el fin de la sequía

Resumen

Tras una prolongada sequía Elías auncia la lluvia sin verla, y habiendo apenas una nubecilla como una mano entiende que se acerca lluvia torrencial: confía en lo que Dios le ha dicho.
Así nosotros debemos confiar en las promesas de Dios, aunque tarden, aunque nos cueste, aunque seamos tan imperfectos… Las promesas de Dios se cumplen.